Un problema de comején en la imagen antiquísima de San Bartolomé Apóstol llevó a descubrir el verdadero estilo de esta obra originaria de la casa de Ferdinando Stuflesser.
De acuerdo con Mario Aguilar, la imagen de San Bartolomé estuvo pintada con el color rojo y dorado que el pueblo barveño conoce durante 25 años.
Detalle del estado deteriorado de la imagen
Proceso de Restauración
El proceso de restauración estuvo a cargo de la artista Mercedes Fontana, quien cuenta con una gran trayectoria en la restauración de arte sacro. Ella fue parte del equipo de artistas que trabajaron en la restauración de la Catedral Metropolitana de San José. La artista está autorizada por la Curia Metropolitana para realizar la restauración.
Fontana realizó un exquisito trabajo de restauración del manto, cuyo estilo original fue recuperable completamente. El detalle muestra las figuras propias del taller Stuflesser, como también racimos de uvas, que estuvieron ocultas por el tiempo.
Se destaca la peana (base donde reposa la imagen) y la cuchilla, pues su trabajo es muy delicado dado que la primera está laminada en oro, el segundo contiene un laminado en plata.
Con el trabajo de decapado se realiza un “envenenado” para dar solución al comején, y se repone el color en las partes donde hay más faltante, dándole una tonalidad similar. Finalmente, se protege la imagen con una película especial para sellar y darle el acabado determinado.
Proceso de restauración de la imagen
Imagen restaurada
Una imagen histórica
El Pbro. Álvaro Saénz logra dar con un dato interesante. En la imagen adjunta se detalle la solicitud de tres imágenes: San Pedro, San Pablo y nuestro San Bartolomé.
Para el año 1928, según se registra en el archivo de la Curia Metropolitana, el primer Arzobispo de San José Monseñor Rafael Otón Castro Jiménez, hizo su visita pastoral a la Parroquia San Bartolomé Apóstol y en su reporte del inventario habla de las, recién compradas y en perfecto estado, imágenes de San Bartolomé, San Pedro y San Pablo. Este dato nos podríamos decir que la edad aproximada de la imagen es de entre 96 a 100 años.
Agradecimiento
La Pastoral de Comunicación agradece a Mario Aguilar por el detalle de las fotografías así como de la información para poder realizar esta nota.