La semana pasada la Parroquia San Bartolomé Apóstol inició el proceso de tala de algunos árboles en la Gruta. Las dos razones principales que guiaron esta decisión fueron la salud pública y la preservación del patrimonio cultural de la comunidad barveña.
En las eucaristías de la semana pasada el presbítero Mauricio Solano Vargas comentó la necesidad de iniciar la tala de algunos árboles en la Gruta, específicamente el higuerón que se encontraba contiguo a la imagen de la Virgen de Lourdes y los pinos.
El tamaño de estos árboles, lo podrido que se encontraban y la superficialidad de sus raíces ponían en peligro la vida de las personas, en caso de que, por distintas razones, estos se vinieran abajo. También estaban dañando el espacio físico en la Gruta.
En el caso de los pinos (especie no nativa de la zona), para muchos especialistas, la presencia de éstos genera que el área donde se encuentre sea pobre en términos de biodiversidad. Específicamente sobre los pinos el científico Francis Sanders explica en una publicación que estos árboles “(…) tienen hojas más pequeñas que las de las especies nativas. Esto implica que ocupan una mayor superficie, tanto para la evapotranspiración como para la fotosíntesis. Es decir, al tiempo que pierden más cantidad de agua que las especies nativas, requieren más agua para llevar a cabo sus procesos de fotosíntesis.”
La Parroquia empezará un proceso de reforestación, utilizando especies nativas que, según el Dr. Gerardo Budowski, profesor de recursos naturales de la Universidad para la Paz, “constituyen un eslabón conocido para procesos naturales como polinización por aves, insectos, mamíferos, dispersión de semillas, relación con epífitas y con la fauna del suelo, reciclaje de nutrimentos, etc..”
Según comentó Bienvenido Méndez, voluntario en el proceso de siembra de árboles, la Parroquia recibirá una donación de aproximadamente 100 ejemplares de corteza amarilla, que serán utilizados para reforestar la Gruta después del proceso de tala. Se espera también sembrar otras especies.
Recordar lo sucedido con las palmeras años atrás
Algunos comentarios en redes sociales de barveños preocupados por la situación, han señalado la similitud de lo sucedido con las palmeras años atrás. La Parroquia recuerda que en su momento la decisión de talar las palmeras se debió a un infestación del insecto llamado popularmente Picudo Rojo (Rhynchophorus ferrugineus).
Este insecto vive a costa de las palmeras, es decir, se alimenta de ellas debilitándolas y matándolas. Los daños son producidos fundamentalmente por las larvas que se alojan en el interior de la palmera y se alimentan de los tejidos más tiernos.
La Parroquia en esos años, tomó la decisión de cortar las palmeras debido al problema de que alguna de estas pusiera en peligro la vida de los pobladores, así como la posibilidad de que el insecto infectara otras especies arbóreas.
Desde ese momento la Parroquia inició también un proceso de reforestación, en el cual se han utilizado especies nativas, entre ellas: uruca, higo, guachipelín, manzanito, nazareno, corteza amarillo, guayabo, níspero, limón dulce, mandarina, aguacate, etc.
